Te comiste un Chori al Paso, una napolitanga con vinazi, pero nada te llena. Evidentemente lo tuyo es un vacío existencial.
_Los Rayos, revista virtual, Los Rayos _ofrece una receta única ante este mal que aqueja al 17% de los caceroleros y al 98.45% de la población mundial:
- Conseguir una caja de cartón.
- Elegir una cara lateral, por ejemplo el 4 del dado, y pintar (con crayones y/o lápices) la cara del animal que te gustaría ser en tu próxima rayoencarnación.
- Entrar a www.julioyagosto.com.ar
- Darle play.
- Colocarse la caja en la cabeza.
- Retirar cuando se sienta llena el alma.
Esta no es una revista de medicina alterna-mágica, con lo cual, como es costumbre en La cocina de Los Rayos, el misterio de Julio y Agosto va a ser develado.
Allá van los Enríquez. Rayos y centellas los esperan.
De los bosques pertenecientes al Conde Chocolacula nace una nueva raza de mamíferos con dientes de sable y mirada penetrante de apellido Enríquez. Inundados por la naturaleza que los rodea deciden, sin mirar atras, comenzar un camino a la fama que no se detendrá hasta llegar a la Yeşilçam, el Hollywood turco.
Luego de pasar 2000 años en las arenas movedizas de senawdwdropan pasaron a formar parte del ejercito de los elfos del sur, confundiendose entre los más grandes guerreros del medio evo.
Existen pocas filmaciones de esta especie, el equipo de investigación Rayo de Mar logró encontrar y restaurar una preciada copia de su canto-llanto “El ritmo de las cosas”:
[iframe src=“http://www.youtube.com/embed/reNS4wFLZkY” height=“315″ width=“580″ allowfullscreen="" frameborder=“0″]
Rumores se corren acerca de un final feliz para los Enríquez. Algunas lenguas, buenas o malas, dicen asegurar que “Julio y Agosto” estuvo a cargo de la música de Homodi, el E.T. Turco:
[iframe src=“http://www.youtube.com/embed/Cl8sT2sxfmM” height=“315″ width=“580″ allowfullscreen="" frameborder=“0″]
Los Rayos saludan a Los Enríquez y los esperan, como siempre, en su mundo virtual.