Ayer, un día antes nomasito de escribir ésta, mi nota número 50, se me acercaron a hablarme de mis reseñas, que empezaban con un hilo que no iba a ningún lado. Honestidad, pura honestidad, eso somos Los Rayos, reflejos de nuestro ser, las notas expresan como somos y nos bancan por todos lados. No esperen más as que el caos y la contradicción que puedo dar, sí esperenlo esperenlo. Hagan lo que quieran.
De una sonrisa se pueden sacar un par de duraznos. Una sonrisa excelsa que chorrea jugosidad radiante por los agujeritos de los dientes y la comisura de los labios y la risa estridente que, por qué no, nos molesta en la base del diafragma y la cosquilluda punta de la napia.
Es por eso y por mucho más que no hables de tu marido, mujer, mujeeeeeer de malos sentimientos. Todo se te ha vuelto un cuento porque no ha llegado la hora fataaaaaal.
Oiganlons, compays, no dejen camino por coger la vereda. No es el orden original pero escuchenlon acá: Good See Social Country. Linda trompetita, eh! SABORRRRR.