Últimamente despertarme es una tarea épica. Es como si a cada segundo de mi recostar la cama me fuera chupando más y más. Y a la hora de la levantada las sábanas funcionaran como las ramas de la hiedra que mientras más querés salir más ajustansennn. ¿Ustedes sintieron la fresca que hace?
Pero no importa, loco, no importa, vieja, no importa, mono. Te dejás el cd preparado y ”debbie down debbie down debbie down down”. Entonces te da fuerza y te levantas sonriendo y moviendo la cabecita chan chan chan, derecha derecha izquierda derecha y las derechas siempre ganan.
Y ahí no más, tirás el omeprazol al aire, lo atajás con la boca, ponés la pava, dos de café,
dos de azucar, chorrito de soda y al ritmo de la música batis batis batis batis, hasta el hartazgo bailando siempore bailando ¡QUE LINDO DÍA, MIS CHINCHULINES! Mirá el sol que se asoma por la ventana y bailá y sonreí y bailá, me despreté me desperté. Gracias Architecture in Helsinki. Gracias Rayos. Gracias sol, buen día sol, buen día día (hacele clik, no seas relámpago).
Chaues.
¿Che, Martín, hacemos una banda como esto, con un toque de Daft Punk y los Chalchaleros?