Esta es la nota que yo estaba esperando, la nota introductoria a mí felicidad. En realidad introduce a una serie de notas que se basan en mi disfrute, sin embargo la felicidad ya está, garantizada y creada, gracias a nuestro amigo Omeprazol.
Yo tomo uno de 20 cada mañana -un par de días me tome un Pantoprazol (panto le decimos en el círculo), pero por ciertas circunstancias que no me parece comentar ahora- y soy feliz. Entonces ¿qué es? ¿me la dio mi psiquiatra o mi dealer de confianza?
Básicamente el omeprazol es un inhibidor de la producción de ácido clorhídrico, éste hace que a mí me duela la panza en un sentir muy parecido al vacío de la angustia. Esto me acompaño durante años hasta que el gastroenterólogo decidió meterme una manguera enorme por la garganta y recetarme felicidad. Desde ese entonces, soy mejor pibe.
Ahora bien, ¿qué tiene que ver todo esto con Los Rayos? El Omeprazol será utilizado como herramienta de medición de calidad. Esto se hará de dos maneras: analizaremos cuántos Omes son necesarios para comer una comida en cuestión y cuántos vale. Por ejemplo, para comer el pollo con hongos de mi vieja necestias como una caja entera de Omeprazol (la crema mata), pero, me tomaría 20 cajas. Eso lo transforma en un saldo positivo y en una invitación a comer.
Bueno, nos encontramos en la próxima cena.