Si acabas de salir del Personal Fest, tu deliveryboy no te responde el teléfono y estás más al pedo que timbre en el cementerio, dejá de dar vueltas y ponete a cocinar con Los Rayos.
Así chabón, cuando llegues a la facultad con tu morral al hombro, el termo bajo el brazo (o entre las piernas) y tus pepas, van a pensar que sos un Rayo y se te van a tirar todas encima. La clave está en hacerlas con mucho amor, como todo, si les das amor, van a ser furor, van a ser magnéticas, no hay nadie más tan popular, vas a querer pasar la lengua entera baby girl, pedirás otra más y en mi coche.
Es muy fácil, pero si no tenes batidora, la batidora, la batidora, la batidora, Un aplauso pa la batidora, es medio paja, y más aún si ni siquiera tenes un batidor. Por eso te voy a dar dos opciones.
Si tenes, arranca con la manteca -250 gr- pomada (a temperatura ambiente) y la blanqueas (batís hasta que quede blanca) con 250 gr de azúcar y esencia de vainilla.
Si no tenes, arranca con la manteca (la misma cantidad) fría y haces un arenado junto con la harina 0000 (500 gr), el polvo de hornear (10 gr), ambos tamizados, la esencia de vainilla y los 250 gr de azúcar. En este caso, los huevos (165 gr, que son poco más poco menos, 3) los desligas y después los incorporas uniendo toda la masa, pero sin amasar. Una vez que tenes la masa lisa y homogénea, la dejás en la heladera/freezer media hora como mínimo.
Si tenes, ya con la manteca blanqueada, agregas los huevos de a uno sin dejar de batir, hasta que se integren. Por último, incorporas la harina junto con el polvo de hornear, sin amasar, y al igual que en el anterior caso, cuando la tenes lista, la mandas a la heladera/freezer.
Una vez que la saques, porque si la dejas adentro te va a ser más complicado, haces cilindros de un ancho que te cope y cortas rodajas de un dedo más o menos de espesor. Las dispones en una placa, haciendo un lindo dibujo, y con un dedo haces una pequeña hendidura en el centro. Y como ya te estarás imaginando, ahí va el dulce de membrillo (espero que si estás leyendo una nota de Los Rayos, no se te va a ocurrir ponerle dulce de batata, de leche te lo puedo aceptar).
Van al horno a 180 °C durante unos 10 minutos.
Y ya estás listo para sentarte en cualquier plaza de la ciudad a tomar mate y comerte unas pepas, diciendo que sos estudiante de sociales mientras divagas acerca de los beneficios que sobre las generaciones venideras producen las notas de Los Rayos.